Madrid, 6 de diciembre de 2010.- Los scouts llevan meses preparándose para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid. Además de que la JMJ será la ocasión para que millares de ellos viajen a España en agosto de 2011, también formarán parte de la organización al aportar 1.200 jóvenes al cuerpo de voluntarios de la organización.
La participación de estos jóvenes es fruto del acuerdo entre la organización de la JMJ y la Unión Internacional de Guías y Scouts de Europa. Es la primera vez que la Jornada Mundial de la Juventud firma un acuerdo con esta asociación para que sus miembros colaboren en la organización.
Durante los días de la JMJ los jóvenes voluntarios scouts ayudarán en las funciones de gestión y alojamiento de los peregrinos, en los lugares habilitados para su acogida y en los actos principales. Los scouts, que vendrán de 17 países distintos del mundo, trabajarán en grupos de seis personas.
La Unión Internacional de Guías y Scouts de Europa es el conjunto de 17 asociaciones nacionales de scouts formado por 55.000 jóvenes católicos repartidos por toda Europa, desde Rusia, República Checa, Ucrania a Francia, Italia y España. Este movimiento católico fue reconocido el 26 de agosto de 2003 como asociación privada de fieles por la Santa Sede y por la Conferencia Episcopal Española en 2007.
No sólo voluntariado
Los scouts que no sean voluntarios también podrán disfrutar de la experiencia de la JMJ desde el espíritu y unidad que tanto caracteriza a este movimiento. Los días previos del 11 al 15 del agosto de 2011, los scouts que participen en el programa de los Días en la Diócesis, como preparación para la JMJ, tendrán la posibilidad de alojarse en distintas diócesis de España para estar en contacto con los scouts locales y de otros países. Durante esos días, se promoverá la oración, la solidaridad, y descubrirán las raíces cristianas de la cultura española a través de actividades relacionadas con la historia, el deporte, el arte y la gastronomía.
"Solidaridad y caridad fraterna"
El propio Juan Pablo II lanzaba ya un mensaje a estos jóvenes en 1994 afirmando que los scouts están llamados a "participar, con todo el ardor de vuestra juventud, en la construcción de la Europa de los pueblos, para que se construya una sociedad fundada en la solidaridad y en la caridad fraterna". Estas son las bases de los principios de los Guías y Scouts de Europa.
Pero no sólo en ellos se encuentra el espíritu de la Iglesia: los Guías y Scouts de Europa están comprometidos con un estilo de vida basado en la formación del carácter, la salud, la habilidad manual, el servicio y el sentido de Dios. Como afirma el responsable de Guías y Scouts de Europa en España, Juan Pedro Sánchez-Horneros: "Son una herramienta de pastoral para las iglesias, un motor de educación en la fe de sus miembros y por tanto una cantera de vocaciones al liderazgo, la vida social y la vocación personal, tanto religiosa como laical". Además sacerdotes y religiosos animan la marcha de los grupos y las actividades llevadas a cabo en demarcaciones parroquiales.
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